Como empresa comprometida con la conservación del Medio Ambiente, Gabitel celebra el Día Mundial de la Tierra adhiriéndose como entidad colaboradora en 2024 al Programa de Seguimiento y Conservación del Aguilucho Cenizo (Circus pygargus) en Huelva, cuya reunión de coordinación ha convocado recientemente a una treintena de responsables, presidida por el delegado territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta, Pedro Yórquez.

En la reunión preparatoria, dirigida por el coordinador provincial de la especie, José Manuel Peláez, estuvo presente el director de Desarrollo de Negocio y de División de Energías Renovables de Gabitel, José Raúl Tejero, que subrayó el compromiso de la compañía con este proyecto de conservación, al que se adhiere aportando material de cerramiento y protección, cajas de sombreo y posaderos, recursos que en campañas anteriores han demostrado un éxito en torno al 80%.

En este sentido, Pedro Yórquez agradeció “la importante aportación de Gabitel, una muestra más de que el modelo de colaboración público-privada es fructífera y redunda en beneficio del medio natural”.

El operativo de la campaña, que estará operativa hasta julio, cuando los los pollos volantones abandonen las zonas de cría, está formado por técnicos de la Junta de Andalucía, Agentes de Medio Ambiente, personal de la Agencia de Medio Ambiente y Agua (Amaya) y responsables de la Asociación Ecologista Ituci Verde, agente activo en los Campos de Tejada.

Una especie vulnerable con amenazas

El aguilucho cenizo es un ave rapaz de tamaño medio catalogada como vulnerable que se asienta en el Valle del Guadalquivir para utilizar los cultivos de cereales como principal hábitat de cría. En la etapa anterior al vuelo, la mecanización agrícola supone una amenaza para los pollos. Los espacios preferidos por el aguilucho cenizo para su cría en la provincia de Huelva son los cultivos de trigo de secano, especialmente en fincas de pequeñas dimensiones de la campiña, si bien en Huelva, específicamente, existen colonias de aguilucho cenizo en marismas.

La reunión de coordinación se ha celebrado en plena fase de localización de las colonias, que comenzó a principios de abril. El Programa de Seguimiento y Conservación del Aguilucho Cenizo se vale de las nuevas tecnologías mediante el uso de ‘smartphones’ y de drones para poner en práctica un modelo menos invasivo para esta especie que evita molestias a los ejemplares y a las cosechas. El equipo de Agentes de Medio Ambiente también se encarga durante este mes de contactar con los propietarios, los responsables de las cooperativas y los cosechadores para conocer cuándo iniciarán exactamente la campaña de cosecha del trigo y prevenir la destrucción de los nidos.

En este sentido, Yórquez destacó que “la colaboración de los agricultores y cooperativas es fundamental para la conservación de la especie, especialmente adecuando las cosechas al momento idóneo considerando el estado del anidamiento y cría de pollos”. La agricultura también se beneficia del Programa, puesto que el aguilucho cenizo permite el control de plagas para el cereal al alimentarse de cigarras y pequeños roedores, además de mantener fuera de los campos de cereal las bandadas de otras aves que se alimentan del trigo, ya que actúa de espantapájaros y ‘espantarroedores’ activo.

Complicada campaña de 2023

La provincia de Huelva albergó un total de 75 nidos de cenizo en la temporada de cría de 2023. Las condiciones meteorológicas, con una primavera temprana y escasa pluviosidad, motivaron el año con menor productividad de pollos desde que se sigue de forma pormenorizada la especie. Solo 18 nidos fueron exitosos y de ellos volaron 36 pollos. Las cifras totales de Andalucía fueron 571 nidos localizados y 511 crías volantonas.

La actuación que mayor número de nidos exitosos ha aportado a lo largo de los años de seguimiento es el retraso de la cosecha. Sin embargo, la escasa cobertura la temporada pasada de las parcelas cerealistas no permitieron la protección necesaria que esta especie necesita para no ser predada o morir de insolación. La intervención más común en 2023 fue la protección del nido con una pequeño cercado con o sin caja de sombreo, con la que se llegó a un 37 por ciento de éxito de los nidos manejados.

De manera tradicional, el aguilucho cenizo se distribuye en la provincia de Huelva en los municipios de Paterna del Campo, Escacena del Campo, Villalba del Alcor, Almonte, Hinojos, San Juan del Puerto, Trigueros, Huelva, Aljaraque, Cartaya, Lepe y Ayamonte. Por séptimo año consecutivo también alcanza a las poblaciones de los parajes naturales Marismas del Odiel, Marismas del Isla Cristina, Marismas del Río Piedras y la Flecha del Rompido y el Espacio Natural de Doñana.

El dispositivo, además, llevará a cabo durante la campaña labores de educación ambiental en los colegios de los municipios con presencia de aguilucho cenizo, entre las que se incluye una exposición itinerante sobre la especie en los mismos centros.